en nuestra casa
no se tira la comida
aunque tampoco
se obliga a nadie
a que rebañe el plato
ahora bien
como iba diciendo
en nuestra casa
no se tira la comida:
las sobras
las echamos
en un envase de cartón
de leche con un poco
de leche y pan
y más tarde
por la noche
cuando ángeles
sale de casa
para ir a trabajar
se lo baja
y se lo sirve
a los gatos callejeros
que nos protegen
de los demonios de la noche
y que ya la están
esperando
también esta noche
a la salida del portal
los gatos callejeros
la están esperando
pero ella se disculpa:
hoy no tengo nada para vosotros
lo siento lo siento mucho
entonces ellos
levantan más la mirada
y la dirigen
hacia la luz
de mi ventana
hacia mí
ahí están mis gatos
les digo que un segundo
y les hago señas con las manos
para que entiendan
-lo entienden de sobra-
que esperen un segundo
que no deben moverse de ahí
que ahora vuelvo
de la nevera
de un paquete ya empezado
saco unas salchichas
las corto en cachos
me asomo a la ventana
y se las arrojo
luego hago lo mismo
con un filete de lenguado
que sobró de ayer
me asomo y se lo tiro
después cierro la ventana
no nos engañemos:
que conste
que no hago esto
por amor a los animales
por amor a los gatos
hago esto
por agradecimiento:
yo también sé
lo que es estar
en la calle
®DAVID GONZÁLEZ, extraído de su poemario EN LAS TIERRAS DE GOLIAT editado con BAILE DEL SOL
QUE BUENO ES ESTE POEMA PEPE.
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