“Momentos Extraños”
De Pepe Pereza
Prólogo de M. J Romero
Epílogo de Adriana Bañares
Arte de Óscar Cardeñosa
En medio de tanta dicha, sentía una especie de dolor, en medio de todos aquellos fantasmas de una presencia, la penosa marca de la ausencia.
(El nombre de la rosa. Umberto Ecco).
JUEVES18 DE JUNIODE 2009
LA SUICIDA PUBLICADO POR PEPE PEREZA EN 00:05
ETIQUETAS: MOMENTOS EXTRAÑOS
Awixumayita dijo...
La versión de Radiohead es acojonante. Volveré a leerlo con la canción de fondo, que seguro que se me mete hasta...No viene al caso, pero me recuerda a una de las microchorradas que tengo escritas en mi moleskine:
Escuchar Radiohead me hace daño. Será porque te quiero.
18/06/09 01:46
I
Anoche soñé con una carretera nocturna. Corría por la línea blanca del andén derecho. Los coches circulaban caóticamente. Nerviosos y con miedo. Parecían más pequeños que yo. La carretera interminable y oscura se asemejaba a mi idea de eternidad. Un plano de oscuridad infinito. Como el universo si lo fuera. Como la muerte. Mi viaje terminó con la noche y vi a un Dios crucificado en el portón de un garaje. Estaba dentro de un relato de Pepe, pensé al despertar.
II
Las noches eran terriblemente frías y temía quedarme dormida por si mi boca se llenaba de insectos buscando cobijo. Yo buscaba cobijo en Asperezas y en Radiohead.
Reckoner. Lucky. Creep. Pepe me hablaba de suicidas. Me hablaba de un Dios mundano. De gente aburrida que de pronto se veía viviendo momentos extraños. De amores breves. Me imaginaba al niño Pepe como un Léolo que escapaba de la sucia rutina de la vida con su imaginación y su escritura. Y aunque mi soledad, el frío y el dolor inmenso de la ausencia me habían devuelto la entomofobia irracional que me perseguía de niña, las noches dejaron de ser tan espantosas.
III
Hoy releo a Pepe y es de día y es primavera. Usted, lector, ha recorrido una carretera. La carretera de la suicida, de Vicente y su encuentro con los extraterrestres. La carretera cortada del barrendero que soñaba con Cuba. Escucho Radiohead pero no hace frío. Usted, lector, ha compartido la última tarde de un abuelo con su nieta. Yo me he emocionado igual. Las últimas frases de Pepe son golpes afilados. Ha recorrido las calles de Logroño en un último paseo que podría ser el primero de una nueva etapa renovada.
IV
Madrugada. Marzo ha muerto para dar paso a abril. Se cumplen dos años de Asperezas.
Lotus Flower. Fumo hachís a falta de rosas. Observo las luces que las farolas del puente dibujan en el agua. Busco un personaje en un momento extraño. Sobre quién verterá su tristeza. No será sobre mí.
Adriana Bañares Camacho (Abril del 2011)