El sol abarcaba el cielo y el bochorno de media tarde se colaba en la habitación como el aliento de un dragón. En la televisión sólo echaban programas para marujas. Todo era aburrimiento.
- ¿Follamos? - propuso ella sin demasiado entusiasmo.
- Hace demasiado calor. – se escaqueó él.
Continuaron viendo la tele y fumando.
- Me aburro. – dijo ella con voz cansina.
- Cómprate un mono que te entretenga.
- Seguro que sería más divertido que tú.
- Seguro.
Continuaron viendo la tele y fumando.
- Sigo aburriéndome. – volvió a insistir ella.
- ...
- ¿Y si nos vamos a las piscinas?
- No quiero moverme. Hace mucho calor.
- Ayer dijiste que iríamos.
- Ayer no sabía que iba a hacer este puto calor.
- Eres un puto mentiroso… – dijo ella recalcando la palabra “puto”- Contigo no...
- (Anticipándose)...se puede contar para nada. Ya me sé esa monserga.
- Eres un gilipollas.
Continuaron viendo la tele y fumando.
- ¿Sabes si queda Coca Cola en la nevera? – preguntó ella.
- Sí.
- Tráeme una. – dijo poniendo voz de niña buena.
- Tráemela tú a mí.
- Estúpido.
Continuaron viendo la tele y fumando.
- Me aburro. - insistió de nuevo ella.
- Joder, yo también me aburro, pero al menos no te doy el coñazo.
- Ya no me quieres. – dijo ella haciendo pucheros.
Él estaba en una encrucijada. Tenía que decidir qué camino tomar. O montaba la bronca o le seguía el juego.
- Te quiero con toda mi alma, con todo mi corazón. Eres la luz de mis ojos...- dijo él apagando el televisor.
- Sigue.
- Eres el aire que respiro. Por ti vivo.
- Más.
- Tus pechos son cántaros de miel.
- ¿Cántaros?
- Sí, cántaros de rica miel. Me sulibellan.
- ¿Sulibellan?
- Es de una canción.
- Que romántico.
- Ya ves.
Ella apagó su cigarro.
- ¿Follamos? - dijo en un sugerente susurro mientras echaba el humo por boca y nariz.
Y eso a él se la puso muy dura.
®pepe pereza
- ¿Follamos? - propuso ella sin demasiado entusiasmo.
- Hace demasiado calor. – se escaqueó él.
Continuaron viendo la tele y fumando.
- Me aburro. – dijo ella con voz cansina.
- Cómprate un mono que te entretenga.
- Seguro que sería más divertido que tú.
- Seguro.
Continuaron viendo la tele y fumando.
- Sigo aburriéndome. – volvió a insistir ella.
- ...
- ¿Y si nos vamos a las piscinas?
- No quiero moverme. Hace mucho calor.
- Ayer dijiste que iríamos.
- Ayer no sabía que iba a hacer este puto calor.
- Eres un puto mentiroso… – dijo ella recalcando la palabra “puto”- Contigo no...
- (Anticipándose)...se puede contar para nada. Ya me sé esa monserga.
- Eres un gilipollas.
Continuaron viendo la tele y fumando.
- ¿Sabes si queda Coca Cola en la nevera? – preguntó ella.
- Sí.
- Tráeme una. – dijo poniendo voz de niña buena.
- Tráemela tú a mí.
- Estúpido.
Continuaron viendo la tele y fumando.
- Me aburro. - insistió de nuevo ella.
- Joder, yo también me aburro, pero al menos no te doy el coñazo.
- Ya no me quieres. – dijo ella haciendo pucheros.
Él estaba en una encrucijada. Tenía que decidir qué camino tomar. O montaba la bronca o le seguía el juego.
- Te quiero con toda mi alma, con todo mi corazón. Eres la luz de mis ojos...- dijo él apagando el televisor.
- Sigue.
- Eres el aire que respiro. Por ti vivo.
- Más.
- Tus pechos son cántaros de miel.
- ¿Cántaros?
- Sí, cántaros de rica miel. Me sulibellan.
- ¿Sulibellan?
- Es de una canción.
- Que romántico.
- Ya ves.
Ella apagó su cigarro.
- ¿Follamos? - dijo en un sugerente susurro mientras echaba el humo por boca y nariz.
Y eso a él se la puso muy dura.
®pepe pereza
No hay comentarios:
Publicar un comentario