domingo, 4 de octubre de 2009

MOHAMED CHUKRI & ALBERT COSSERY


Gracias a los consejos de mi amigo José Ángel Barrueco he podido ir consiguiendo por la red los ejemplares de dos escritores geniales: Mohamed Chukri y Albert Cossery.

Mohammed Chukri (en árabe, محمد شكري), transcripción más conocida en castellano, y en ocasiones Šukrī, Choukri o Shukri, fue un escritor marroquí nacido en 1935 en Beni Chiker, un pueblo cerca de Nador, en la region del Rif, y muerto en Rabat en 2003.
En 1945 su padre deserta del ejército español y se traslada con toda su familia a Tánger. Allí Mohammed aprende español y se gana la vida haciendo de guía a los marineros que llegan a la ciudad. Fue educado en una familia pobre; la violencia de su padre le obliga a huir y vivir en las calles de Tánger, subsistiendo en medio de la miseria, la violencia, la prostitución y las drogas. Con veinte años, encarcelado, aprende a leer y escribir, tras lo cual marcha a estudiar a Larache.
En los años 60 vuelve a Tánger, donde fijará su residencia de forma permanente. Comienza a publicar sus obras en 1966: en Al-Adab, mensual de Beirut, su novela Al-Unf ala al-shati (Violencia sobre la playa).
Sus mayores obras son la trilogía autobiográfica que empieza con Al-jubz al-hafi (El pan desnudo), sigue con Zaman al-Ajta (Tiempo de errores), y finalmente Rostros, amores, maldiciones (edición en español del 2002). Escribió también novelas en los años 60 y 70 (Maynun al-Ward (El loco de las rosas), 1980 ; Al-jayma (La tienda), 1985). Escribió asimismo sus memorias sobre sus encuentros con los escritores Paul Bowles, Jean Genet y Tennessee Williams (Jean Genet y Tennessee Williams en Tánger, 1992, Jean Genet en Tánger, 1993, Jean Genet, continuación y fin, 1996, Paul Bowles, el recluso de Tánger, 1997). Ha traducido al árabe poemas de Bécquer, los Machado, Vicente Aleixandre, Lorca, Labordeta, Susana March...
Murió de cáncer el 15 de noviembre en 2003, en el hospital militar de Rabat. Fue enterrado en el cementerio Marshan de Tánger el 17 de noviembre con la presencia del ministro de Cultura de Marruecos, altos funcionarios, personalidades del mundo de la cultura y de un representante del palacio real. Antes de morir creó una fundación con su nombre, que posee sus derechos de autor y conserva sus manuscritos. Chukri dejó en testamento una pensión vitalicia a Fathia, su ayudante doméstica, que lo acompañó durante más de veinte años.

Albert Cossery (El Cairo, 3 de noviembre de 1913 - París, 22 de junio de 2008) fue un escritor francófono de origen egipcio. Nació en El Cairo en 1913, hijo de una mujer analfabeta y de un rentista que pasaba la mayor parte del tiempo leyendo el periódico, lo que hizo que desde pequeño quedara fascinado por la capacidad de no hacer nada; decía que escribía dos frases por semana. Viajó por primera vez a París en 1930, con diecisiete años. Entre 1939 y 1945 trabajó como segundo de a bordo en un mercante egipcio. Al acabar la guerra se instaló en París, en una habitación de hotel en la que viviría el resto de su vida. fue amigo de Albert Camus, Lawrence Durrell, Henry Miller, Jean Genet, Juliette Gréco, Alberto Giacometti o Boris Vian. Murió en París con noventa y cuatro años.
OBRA:
Los hombres olvidados de Dios, 1936.
La casa de la muerte segura, 1942.
Los holgazanes en el valle fecundo, 1948.
La violencia y la burla, 1964.
Un complot de saltimbanquis, 1975.
Una ambición en el desierto, 1984.
Mendigos y orgullosos, 1998.
Los colores de la infamia, 1999.

Si podéis haceros con sus libros no lo dudéis. Os garantizo una experiencia única.
(información sacada de la Wipipedia)








4 comentarios:

Javier Belinchón dijo...

Los hombres olvidados de Dios y El pan desnudo han sido dos de los últimos libros que me he leído.

El pan desnudo me flipó pero el de Cossery... No sé, ni fu ni fa.

No sé qué pensarás tú.

Un abrazo.

pepe pereza dijo...

Javier, ese libro todavía no lo he leído. Si me he leído La violencia y la burla y Mendigos y orgullosos. Ambos son cojonudos, al menos para mi gusto. El primer capitulo de mendigos y orgullosos no tiene desperdicio.
En cuanto a Chukri, te digo que me encanta, y más si voy ciego d hachís. Me meto en su mundo de una manera directa. Estoy esperando que me llegue Tiempo de errores. A ver si llaga pronto. Bueno Javier, un placer hablar contigo. Te deseo lo mejor.
Abrazo

Ico dijo...

Gracias Pepe por las recomendaciones, había oído hablar del marroquí.. pero ya me has convencido. Qué poco conocemos de los escritores árabes nos hemos quedado con dos nombres y basta.. un abrazo

la-dormilona dijo...

Ayer por la noche me quedé despierta leyendo "Mendigos y orgullosos". Me pareció una obra excelente y no vale la pena solo por eso, sino porque relaja. Mientras lees a Cossery parece que la vida está bien. Que basta de darle vueltas a la cabeza y buscar explicaciones que la cosa consiste en estar presente. En la actitud...
En cuanto a Chukri...buff. Leer "El pan desnudo" es un viaje. Los contadores de historias suelen ser literatos, lo cual no facilita que se pongan en la piel de los "tiraos". Siempre es un ejercicio de imaginación. Pero no el caso de Chukri. No hay ejercicio de imaginació, es un ejercicio unicamente de narración. El es el protagonista y te lo cuenta de tú a tú. Me parece increible. Es de una sinceridad descarnada.
Me encantan los dos autores.
Un saludo y gracias :)